Lara O Clarete

Nombre: Lara O Clarete
Tipo de vino:  Clarete
Variedades: Tinto Fino (Tempranillo), Albillo Mayor y Garnacha
Graduación alcohólica: 13 % vol.
Zona: Aranda de Duero, Ribera del Duero – Castilla y León (España)
Bodega: Territorio Luthier

Nota de cata:

Color rosa pálido con matices salmón y reflejos cobrizos. En nariz es fresco y expresivo, con notas de fresa silvestre, frambuesa, cítricos y flores secas. En boca es amplio, delicado y envolvente, con una acidez vibrante que aporta tensión y un final largo, ligeramente mineral y salino.

Filosofía y productor:

Territorio Luthier, fundado por Cristina Alonso y Fernando Ortiz, representa una nueva generación en Ribera del Duero. Su filosofía se basa en la paciencia, el respeto por la naturaleza y la búsqueda de la elegancia a través de la mínima intervención. Lara O Clarete es un homenaje a los claretes tradicionales de la zona, elaborados con variedades blancas y tintas fermentadas juntas, siguiendo un estilo ancestral reinterpretado con precisión y sensibilidad moderna.

Temperatura de servicio:

8–10 °C

Maridaje:

Ideal con embutidos, arroces de verduras, pescado azul, aves ligeras, platos de pasta fresca o una tabla de quesos jóvenes. Excelente como vino de copa por su frescura y equilibrio.

Crianza:

Crianza parcial sobre lías finas durante unos meses en depósitos de acero inoxidable, buscando textura y complejidad sin perder vivacidad.

Elaboración:

Vendimia manual. Uvas blancas y tintas cofermentadas con levaduras autóctonas. Maceración breve para obtener un color delicado. Fermentación a baja temperatura y crianza sobre lías antes del embotellado.

Bodega:

Territorio Luthier elabora vinos honestos y personales desde su bodega en Aranda de Duero. Su nombre hace referencia al oficio del lutier —el artesano que construye instrumentos—, una metáfora de su forma de entender el vino: precisión, sensibilidad y armonía.

Viñedo:

Parcelas seleccionadas de viñas viejas en diferentes puntos de Ribera del Duero, con altitudes entre 800 y 900 m. Suelos franco-arenosos y calizos, con cepas equilibradas de bajo rendimiento.

Clima:

Continental extremo, con inviernos fríos y veranos secos. La gran amplitud térmica entre día y noche favorece una maduración lenta, conservando la frescura y acidez natural del vino.